Victima
de un accidente. Muere Fernando Andrés Barrio. Fue
nuestro corresponsal en Haro.
La Voz del Oja-Tirón. Enero 2005.
A los 58 años
de edad falleció en accidente de circulación el pasado
día 17 de diciembre nuestro recordado y querido amigo Fernando
Andrés Barrio, que fue durante buena parte de la vida de
este periódico su colaborador y corresponsal en Haro y su
comarca. Su carácter alegre y bonachón le granjeó
la amistad de muchas personas con las que compartió mesa
y mantel alrededor de buenos vinos de Rioja y mil anécdotas
curiosas. Fernando Andrés ejercía en el momento de
su muerte como secretario de los Ayuntamientos de Leiva, Fonzaleche,
Villaseca, San Millán de Yécora y Treviana que declararon
luto oficial, instalando en sus balcones principales las banderas
a media asta, con crespones negros. El vehículo todo-terreno
que Fernando conducía fue arrollado cuando se dirigía
a su trabajo, a las 9,20 horas de ese viernes, por un camión
en la N-232, produciéndole la muerte instantanea. Era portavoz
de la Asociación en Defensa de la Sonsierra. ¡D.e.p.!
Fallecimiento
sentido.
El Correo, lunes, 20-12-2004, artículo
de la Sociedad Landázuri.
Un desgraciado accidente
de circulación se llevó el viernes 17 a Fernando Andres
Barrio, natural de Haro, persona culta, excelente conocedor de la
historia, especialmente de las tierras riojanas de ambas orillas
del Ebro.
Fernando Andres Barrio, de profesión
secretario de Ayuntamiento, era un pozo de ciencia, pero sin ninguna
arrogancia ni pretensión. Él quería saber,
ante todo. Y además disfrutaba enseñando lo que él
había adquirido en sus largas lecturas y experiencias. La
visita de la Sociedad Landázuri a Briones y al Museo de la
Cultura del Vino, el pasado 24 de octubre, tuvo en él un
magnífico guía. Tanto en la villa como en el museo,
sus explicaciones fueron del mayor interés, llamando la atención
del grupo sobre aspectos que no salen en los libros y folletos.
Y todo ello con una palabra fácil y al mismo tiempo apasionada.
También con cierta amargura, pues nuestro amigo se quejaba
de no poder publicar lo que tenía escrito, a causa de actitudes
mezquinas de ciertos responsables políticos.
Descanse en paz Fernando Andrés
Barrio. Y nuestro más sincero pésame a sus familiares
y amigos.
arriba
Adiós
a un amigo de la viña y del vino.
La Rioja, diciembre 2004. (Cartas al director).
Sr. Director: El pasado 17 de diciembre
se produjo un accidente de tráfico en el que perdió
la vida Fernando Andrés Barrio, vecino de Haro.
Él era secretario de ayuntamiento
de profesión, pero un gran estudioso del mundo de la viticultura
y la enología históricas de devoción. Bebía,
fundamentalmente, en las fuentes de la documentación medieval
riojana para realizar sus artículos en revistas especializadas
y en la prensa, así como sus comunicaciones y ponencias en
diversos congresos del citado ámbito de conocimiento. En
los últimos años, se interesó, también,
en las plagas y enfermedades de la vid silvestre y cultivada e,
incluso, en los sacacorchos, botellas de vino, de destilados y garrafas
de alcohol para el encabezado de los caldos.
Foto: Paseo de Iturrimurri, junto a su vivienda en Haro.
Dominaba el francés, por lo
que, además de guiar grupos galos interesados en el turismo
enológico, era utilizado por sus amigos a la hora de hacer
trabajos y resúmenes en ese idioma. Como en un frontón,
las líneas de Internet le hacian textos en castellano que
rebotaban de su ordenador jarrero en un francés académico,
al que ninguna revista puso nunca pega.
Fernando era una persona afable, con
una envidiable facilidad de palabra, la cual empleaba, en muchas
ocasiones, para hacer de abogado de las causas que el consideraba
justas, a nivel político, contra el terrorismo y la extorsión
etarras y para defender con pasión el patrimonio arquitectónico
y natural de su región. Y, por supuesto, de forma totalmente
altruista, sin sacar ningún tipo de beneficio propio. Su
gran simpatía y elocuencia le hacían destacar rápidamente,
por lo que era muy querido en todos los eventos del mundo vitivinícola,
como era el caso de las Jornadas de Tierra de Barros, que se celebran,
cada mes de mayo, en Almendralejo (Badajoz), o en El Puerto de Santa
María, Oporto, Madeira, etc. En esos foros, siempre se comportó
como un estusiasta abanderado de La Rioja.
Pertenecía a la Asociación
Internacional de Historia y Civilización de la Vid y el Vino,
y consiguió que el IV simposio de dicha sociedad se celebrara
en Haro, en junio del pasado año, al ser respaldado por la
corporación municipal, Universidad de La Rioja, entidades
financieras y empresas, muchas de ellas bodegueras.
A nivel personal era como los icebergs:
tenía una gran humanidad física -fruto de sus gustos
epicúreo-gastronómicos- que albergaba otra humanidad
espiritual de mucha mayor dimensión. Era un amigo leal con
el que se podía contar siempre, capaz de alegrar cualquier
reunión y de emocionarse al oír los versos de Berceo
cuando se encontraba fuera de La Rioja.
Fernando no era creyente, pero tenía
buenos amigos entre el clero, por lo que, además de en Haro,
seguro que se habrán oído plegarias desde los Montes
Cogollos hasta Mazagón (Huelva), pasando por Bañares.
En su lugar de ocio más frecuentado,
un bar situado en la plaza de la Paz de Haro, así como en
la memoria de todos sus variopintos amigos del norte y del sur,
siempre habrá una ausencia irreparable.
Cuando llegue la primavera de este
año, el lloro de las cepas seguro que será más
abundante, por que ellas también recordarán a Fernando;
igualmente, los vinos de calidad dejarán sobre el vidrio
de la copa de cata un mayor lagrimeo...
Rafael Ocete Rubio. Facultad de
Biología. Universidad de Sevilla.
gorantz-arriba
LA TOPONIMIA DE LA
ALDEA DE TURZA (EZCARAY)
Euskaltzaindia. Actas de las II Jornadas de Onomástica.
Orduña. Septiembre de 1987.
Esta comunicación hubiera debido presentarse
dentro del apartado “Onomástica vasca en zonas hoy
no vascófonas” y tenía por objeto, a partir
de los topónimos publicados por Juan Bautista Merino Urrutia
y Santiago Arregui Belar, confeccionar un mapa del valle de Turza,
añadiendo la toponimia de posible raigambre euskérica,
que me fuera posible recoger de las personas que todavía
siguen, de una u otra forma, ligados a la aldea, sin despreciar,
naturalmente, aportes documentales, hoy relativamente difíciles
de localizar, la haber desaparecido la mayor parte de la documentación
del archivo de Ezcaray, en un incendio que destruyó el Ayuntamiento
en el año 1945.
A lo largo del trabajo de la encuesta pude llegar a dos conclusiones
fundamentales, a saber:
- Mi muy elemental conocimiento de la lengua vasca me veta, hoy
por hoy, este tipo de investigación, si ha de realizarse
con un mínimo rigor.
- La enorme cantidad de nuevos topónimos aparecidos, durante
la investigación, en el territorio de la Aldea de Turza,
es, evidentemente, una mínima muestra de los que pueden recopilar
en todo el Término Municipal de Ezcaray. Falta, evidentemente,
una gran cantidad de topónimos por recoger y he podido apreciar
a lo largo del trabajo, en el que he recogido topónimos de
otras aldeas, y analizando las listas de Arregui y Merino que un
número relativamente alto de nombres se repiten, en una o
más aldeas, dentro del mismo Termino Municipal. Por lo tanto,
no queda más remedio que ampliar la recogida a TODA la toponimia
del valle si el trabajo tiene que tener una cierta trascendencia
en cuanto su utilidad final.
He aquí por qué considero que otra comunicación
debe ser incluida en el apartado de “Estudio de la onomástica,
archivos, métodos, recogida y clasificación”.
Aunque se adjunte una lista de los topónimos recogidos en
el curso de la investigación del territorio de la Aldea de
Turza, se tratará, más bien, de poner de manifiesto
las peculiaridades que hacen necesario un método particular
para recoger la toponimia de Valdezcaray.
La recopilación ha de ser exhaustiva y urgente, pues esta
notable riqueza toponímica está, archivada en las
memorias de los antiguos propietarios de las fincas. De éstos
que conocieron, por su nombre, los pagos, fincas, fuentes, caminos,
pasadas, accidentes geográficos, etc., gran parte han muerto
o emigrado.
El noventa por ciento de las fincas llevan una media de veinte años
abandonadas y sin cultivo y los menores de treinta años no
las han trabajado jamás, las han visto pocas veces o ninguna
y si se han aproximado a ellas ha sido a través del Catastro
de la Riqueza Rústica que encubre, a veces, hasta veinte
nombres diferentes bajo una misma denominación.
Uno de mis informadores, persona de unos cincuenta años de
edad, fue, precisamente, el que acompañó a los funcionarios
del catastro cuando se hizo el de la Aldea de Turza, hemos podido
comprobar, con los planos en la mano, que los nombres que se les
iban dando para una o varias fincas eran aplicados a extensiones
mucho mayores (curiosamente se daba nombre a bandas de terreno transversales
al sentido del valle, cuando lo lógico hubiera sido nombrar
los pagos por escaños o pisos en una zona en que los aterrazamientos
son la forma común de cultivo), dejando sin recoger la mayoría
de los nombres de fincas que tenían nombre propio, como es
el caso de muchos prados de regadío
El objetivo que, en principio, me había marcado era la localización
por cualquier medio de los topónimos que pudieran ubicarse
en la zona de la Aldea de Turza. En esta Aldea, resido desde 1985
y estaba prácticamente abandonada en el año 1970.
Territorialmente Turza está situada en el ángulo NE
de Ezcaray, limitando al N con el término Municipal de Ojacastro,
concretamente con la Cuadrilla de Garay, al E con el término
Municipal de Pazuengos, al S con una línea que, partiendo
del pico Chilizarrias, une las cumbres de éste con las de
la Collado de Marulla y los Cerros de Orquicia, la Puerca Mingaña
y el Horquillo, siendo el límite E el marcado por el Rioja
Oja Glera.
Turza tenía 137 habitantes en 1752, 90 en 1945, 87 en 1960
y 45 en 1964. Como ya se ha dicho, en 1970 estaba prácticamente
abandonada.
La base documental de mi trabajo la constituyen, de momento, datos
ya publicados que, felizmente, para la zona de Ezcaray son relativamente
importantes gracias a la labor de Don Juan Bautista Merino
Urrutia (El río Oja y su comarca, Logroño,
1968 y La Lengua Vasca en La Rioja y Burgos, Logroño, 1978)
y Don Santiago Arregui Belar, (“Toponimia
de Ezcaray”, Euskera III, 1958, y precioso mapa del año
1957, editado artesanalmente en Bilbao). También, por fortuna,
varios de los documentos medievales más antiguos en los que
se contienen topónimos hacen referencia al Término
de Ezcaray que se encuentra próximo, y ha tenido, tradicionalmente,
estrechas relaciones con los monasterios de San Millán y
Valvanera, dos de los más importantes focos “productores”
de documentación medieval de La Rioja.
Veamos, brevemente, dos significativos ejemplos. El documento de
donación al Monasterio de Ntra. Señora de Valvanera
de la Iglesia de Santa María de Ubaga, de 1110, en el que,
por primera vez aparece Ezcaray, “villam que vocatur Yzcarahi”,
aparecen ya Turza, “e hotra pieça en Iturricha”,
y el Pago de Balanegra, también de Turza, “e III pieças
en Val Negra”.
Pero aunque la generalidad de los Historiadores sitúa en
este año la primera referencia al término de Ezcaray,
existe un documento del año 959 en el cartulario de San Millán
de la Cogolla referente a las bacarizas de San Millán en
diversos lugares en el que aparecen bacarizas en Refoio (Rehoyo)
y Benifederra (Beneguerra), así como en otros siete lugares
que no puedo identificar ahora pero que no es improbable se encontrasen
dentro del territorio que abarca este trabajo.
Especialmente interesante es el tratamiento que se da, en Ezcaray,
a los nombres de las fincas, sobre todo a los prados de regadío.
Casi todos los prados tienen su nombre, alguno tiene nombre y apellido
y los que no los conservan es porque han desaparecido sus propietarios.
Urge, pues, una recogida oral de todo lo que se pueda encontrar
en las memorias de los que todavía tienen los recuerdos de
las fincas que un día cultivaron sin despreciar, naturalmente,
los aportes documentales que, posteriormente, puedan ser incorporados
al trabajo.
El material recogido lo he organizado por orden alfabético,
partiendo siempre de la versión que se me ha dado en la encuesta
oral. A modo de experimento he incorporado los topónimos
con el mismo nombre que recogieron Merino Urrutia y Arregui Velar
y los que aparecen en el Catastro.
El resultado, provisional naturalmente, de estas primeras encuestas
ha sido relativamente alentador. Para la misma extensión,
el término de Turza, que es el catastro de Rústica
se reduce a unos cuarenta y seis nombres, he recopilado, hasta el
momento, ciento sesenta y tres.
En el mismo territorio Arregui Bilar encontró cuarenta y
ocho, Merino Urrutia treinta y dos y yo he añadido ochenta.
La mayoría de los nuevos nombres son romances, pero muchos,
por no decir la mayoría, de los recopilados por Merino y
Arregui también han sido mencionados por mis informadores.
De lo estudiado hasta el momento he podido sacar las siguientes
conclusiones:
- Si el número de topónimos es de ciento sesenta y
tres, por el momento, para la zona de Turza, es casi seguro que,
para el Término de Ezcaray, han de llegar a recogerse unos
mil seiscientos nombres, lo que supone una cantidad de topónimos
considerable en un solo término municipal.
- Es muy posible, y lo digo por las muestras que he recogido en
otras aldeas y que todavía no he clasificado por completo,
que Merino Urrutia y Arregui no recogiesen todos los topónimos
de origen o formación eusquérica.
- Y, por último, la posibilidad de encontrar fuentes documentales
no es tan pobre como en un principio pudiera parecer, sin olvidar
que las hay, los cartularios, que si no son abundantes son al menos
interesantes en grado sumo.
arriba
TURZA
- AGUJA, CERRO LA CAT
ALBORTIGA MU AB
ALGORTIGA MU AB
ALMARQUIA MU AB
ALMARTIA MU AB
ALMICIA AB CAT
ALLENDE CAT
APIA CAT
ARAMBURA MU AB CAT
ARENAL, EL
ARRASTRADERA, LA
ARSOVIA CAT
ARTICORANA MU AB
ASTILLAR, EL
AZUYA MU AB CAT
BALANEGRA (VAL NEGRA 1110)
BALLESTAS, LAS CAT
BARRENA, CALLEJA AB
BARTOLO, CAMPO
BENÉCULLA AB
BENEGUERRA (BENIFEDERRA 959 CART)
BIGARNA AB CAT
BLANCA, PEÑA CAT
BONICAPARRA (DESPOBLADO) AB CAT
BURRARA
CABALLERO CAT
CALERA, LA CAT
CALLEJA, LA
CAMPAZO, EL
CAMPO DE LA CRUZ
CANTON, EL
CAÑAMAL
CARANA MU AB
CARBONERAS, LAS
CASCAJO, EL
COLMENAR, EL AB CAT
CONCEJO, EL
CORRELAGUA CAT
CUADROS DEL COLLAO
CUESTAS, LAS
CUEVACHÓN, EL
CUEVAS, LAS
CUMBRE, LA CAT
CHÁDMUGA MU
CHARCAS, LAS
CHILIZARRIAS MU AB CAT
CHÓCOLLA AB CAT
CHOZA TEJA, LA
DORALDIA MU (1752) AB
EGIDO, EL
ERA LA PEÑA, LA
ESCONOBIA AB CAT
ESPURGAÑA (DESP) (ESPEÇUGAÑA 1487) MU
ESPUZARRA AB
ESTACIÓN, LA CAT
ESTETURRIA, FUENTE MU AB CAT
ESTILLAR, EL
FRESNO, EL
FUENTE DE DOMINGO RAMOS
FUENTE DEL VALLE
FUENTE FRÍA
FUENTE MALA
FUENTE, CERRADA LA
GALICHA AB
GALICHO MU
GARDUCIA MU AB
GUSARAMBIA AB
HORCÓN, EL
HORQUILLO, CERRO DEL
HOYA, LA
HUEVERA, CERRADA
IGLESIA, PRAO LA
ILANGUIA MU
JUANA, HOYO LA
JUANBARRENA AB CAT
JUTA, PEÑA AB CAT
LAGUNAS, LAS
LANETURRIA MU AB
LARRINZALA
LARRIZABALA
LASTRAS, LAS
- LUENGOS, LOS
- MAGUILLO, EL
- MANZANOS, LOS
- MARULLA, MAJADA DE
- MATA MAYOR, LA
- MOLINO, EL
- MONICARRIA, CALLEJA
- MONTE LA CRUZ
- MORCILLA, LA
- MORENA, FUENTE
- MOROS, PEÑA LOS
- MUNTIÓN
- NEVERAS, LAS
gorantz-arriba
Toponimia del término
municipal de Ezcaray.
La toponimia de formación vasca. Merino Urrutia, Arregui
Belar y otros
Euskaltzaindia. Actas de las III Jornadas de Onomástica.
Estella. Septiembre de 1990.
Cuando, tras las II Jornadas de Onomástica
de Orduña, decidí ampliar el ámbito geográfico
de la recogida de topónimos que estaba haciendo de la Aldea
de Turza al término municipal de Ezcaray, tras una primera
aproximación a las publicaciones existentes me pareció
que muy pocos topónimos nuevos, sobre todo de formación
vasca, iba a ser posible recopilar en el territorio de Valdezcaray.
Me equivocaba. Como se equivocaba Don Santiago Arregui Belar
con quien tuve la suerte de poder hablar hace unos días en
plena Plaza de Conde Turrimuzquiz. Hablamos de su trabajo publicado
en 1958 en la revista Euskera, me confesó, no sin cierto
orgullo, que había pensado entonces, tras encontrar ciento
veinte nuevos topónimos no publicados hasta entonces por
Merino, que muy difícil iba a ser para quien pretendiese
recoger nuevos nombres tras la publicación de los recogidos
por él conseguir algo nuevo.
Se sorprendió cuando le dije que tras un primer estudio de
su trabajo y el cotejo de su contenido con el de la última
edición de “La Lengua Vasca en La Rioja y Burgos”
publicado por Merino en 1979 los topónimos facilitados por
él y que no constan en Merino son 236 y que yo mismo, sin
haber todavía terminado la tarea de recogida oral en la totalidad
del Valle de Ezcaray, he podido recoger 86 nuevos nombres (sin contar
los claramente comprensibles en castellano que para esta comunicación
no se contabilizan por las razones que luego se dirán).
Al reunir, aunque no de forma exhaustiva, (faltan seguramente artículos
de prensa y otras publicaciones de difícil localización
que será preciso ir incorporando al trabajo a medida que
éste vaya progresando) las publicaciones en que se hace alusión
de una forma u otra a la toponimia del territorio a estudiar, se
aprecia su escasez y una relativa falta de calidad en su conjunto.
No sucede así para Merino Urrutia que con
Arregui y Rittwagen es, hasta
época relativamente reciente, el único que recoge
toponimia menor de La Rioja en cantidad apreciable.
Hay que llegar al año 1979 para que otro autor, en este caso
Ildefonso Rodríguez de la Lama, publique varias listas de
toponimia menor dentro del ámbito de su obra “Colección
Diplomática Medieval de La Rioja”; y tienen que pasar
otros ocho años para que en 1987 se publique el “Diccionario
de Toponimia Actual de La Rioja” de Antonino González
Blanco, obra ésta de inmenso mérito que recoge
gran parte de la toponimia de La Rioja, incluyendo naturalmente
la menor, así como la publicada hasta el momento por Merino
y Rodríguez de la Lama.
En todas sus publicaciones mencionadas se hace alusión de
una u otra forma a la toponimia del territorio de Ezcaray.
Del resto de los trabajos que he podido encontrar sobre toponimia
riojana y que en número no llegan a diez solamente tres hacen
alusión a Ezcaray.
En 1950 Alarcos Llorach en "Apuntaciones sobre Toponimia Riojana"
hace referencia a Ezcaray y a alguna de sus aldeas, todos los nombres
que inserta ya habían sido publicados por Merino Urrutia
y así lo hace constar Alarcos.
En "Toponimia Riojana" de Carmen Ortiz Trifol, no se encuentra
tampoco nada que pueda sernos útil para el estudio de la
toponimia del territorio que nos ocupa a pesar de que figura Ezcaray
con algunas de sus aldeas.
No quiero dejar de mencionar aquí la alusión que se
hace a la toponimia de Ezcaray dentro del capítulo titulado
"Pervivencia Ibérica en La Rioja" perteneciente
al disparatado y caro, volumen que lleva por título "Lectura
y Traducción de la Lengua de los Iberos" cuyo autor
es Don Edelmiro Zamanillo Rosales, su singular interpretación
etimológica de algunos topónimos basta, a mi juicio,
para justificar su inclusión aquí.
Hay que hacer constar también que aunque Rodríguez
de la Lama no hace expresa referencia al término municipal
de Ezcaray, su trabajo es ciertamente interesante y útil
para cualquiera que pretenda recopilar la toponimia del valle ya
que se ocupa muy directamente de las salidas de éste hacia
La Rioja.
Habiéndome pues propuesto la recogida exhaustiva de TODA
la toponimia del Valle de Ezcaray y sus aldeas y su localización
topográfica pienso que ha de ser gran ayuda el conjunto de
lo publicado sobre este tema para La Rioja sobre todo, naturalmente,
en lo que hace referencia al territorio de Ezcaray y muy especialmente
las publicaciones de Merino Urrutia y Arregui Belar.
En este sentido y proponiéndomelo como finalidad de esta
comunicación he procedido a cotejar la totalidad de topónimos
publicados por los mencionados Merino y Arregui y los recogidos
por mí, con dos objetivos fundamentales; por un lado incorporar
al fichero los nombres ya publicados y por el otro llegar, aunque
fuera subjetivamente, a determinar el estado de la cuestión
en el sentido de conocer las posibilidades de aumentar las colecciones
de topónimos que hasta el momento nos son conocidas con otros
nuevos sea cual sea su procedencia.
No he considerado oportuno incluir en la encuesta los topónimos
publicados en el "Diccinario de Toponimia Actual de La Rioja"
por lo complicado que puede llegar a ser extraer sólo los
topónimos de Ezcaray y más considerando que no ha
de ser difícil solicitar del autor una lista comprensiva
de los mismos.
Aún así, y a modo de experiencia, he realizado una
prueba con la letra -A- de la que tengo, por el momento, ciento
veinticinco fichas; en el diccionario figuran ciento siete nombres
de los cuales setenta y cinco están tomados de Merino Urrutia,
de los restantes catorce figuran en mi fichero y diecinueve no los
tenía recogidos. Por el contrario no figuran en el diccionario
veintiún nombres publicados por Arregui y quince recogidos
por mí y todavía inéditos.
Si a este porcentaje de novedades (el 7% para la letra -A-) se mantiene
para el resto del abecedario la aportación del diccionario
a la toponimia de Ezcaray no es en absoluto desdeñable, sobre
todo considerando que Antonino González Blanco tiene anunciada
la publicación de la toponimia contenida en el Claustro del
Marqués de la Ensenada lo que nos dará una idea de
cómo Merino Urrutia seleccionó los nombres que también
él extrajo del Catastro.
Este ensayo sobre la letra -A- del Diccionario se ha hecho en base
a la toponimia recogida por el autor y por mí, para el cotejo
que quiero hacer con los materiales publicados por Merino y Arregui
ha sido imprescindible proceder a una selección que me aproximase
al método de los mencionados autores cuando se plantearon
sus publicaciones.
Dice Merino en "El Vascuence en La Rioja y Burgos (1949)"
"En la selección de nombres he seguido la misma norma
que en el dicho trabajo (se refiere al titulado "El Vascuence
en el Valle de Ojacastro (1936)" o sea, que he incluido todos
aquellos que son a mi juicio total o parcialmente vascos. Figuran
también varios toponímicos (sic) que, aunque no sean
vascos, son dignos, por sus características, de figurar en
esta clase de colecciones, pues su conocimientos puede ser útil
al investigador".
No pudiendo seguir a Merino al pie de la letra por un lado por culpa
de mi casi total desconocimiento del Euskera y por otro porque,
de momento, sólo recojo y clasifico toponimia sin entrar
a determinar su etimología, he realizado mi selección
de la forma en que lógicamente puedo aproximarme más
a su método, es decir he dejado por el momento en el fichero
todas ls palabras que tienen claro significado en castellano y que
son la mayoría de las que clasificaremos como nombres no
publicados por Merino y Arregui y recogidos por mi teniendo en cuenta
que el objetivo de mi trabajo es recoger todos los topónimos
del término municipal de Ezcaray, hecha esta salvedad he
dejado para su cotejo los que de una u otra forma hubiera seleccionado
Merino y que no aparecen entre las publicadas por él.
Hay que precisar que Merino publicó unos quinientos ocho
nombres, Arregui unos cuatrocientos dieciocho y yo unos cuatrocientos
setenta y cinco de los que doscientos cuarenta y dos he considerado
que pueden ser equiparados a los publicados por los mencionados
Merino y Arregui.
¿Por qué no doy cifras exactas al hablar de los topónimos
recogidos y publicados por cada autor? Pues porque seguramente hay
topónimos repetidos con diferentes grafías o bien
el mismo nombre designa dos accidentes geográficos diferentes,
y todo esto habrá que llegar a determinarlo solamente al
final del trabajo.
Con las cantidades que he mencionado ha confeccinado un gráfico
en el que constan el número de los topónimos exclusivamente
publicados por Merino, los que publicó Arregui Belar así
como los recogidos por mí y todavía inéditos
y como consecuencia las palabras en cuya recogida coincidimos los
tres o dos entre los tres encuestadores.
Las conclusiones que pueden deducirse del estudio de este gráfico
son realmente interesantes.
Merino es, con mucho, quien más toponimia de la zona ha reunido,
pero no incorporó a su repertorio los topónimos recogidos
y publicados por Arregui. ¿Qué razones tuvo, si existieron,
para no hacerlo? Es una pregunta que me inquieta y para la que seguramente
no encontraré nunca respuesta, si no es en el hecho de que
ni Merino ni Arregui se propusieron nunca la recogida sistemática
de la totalidad de la toponimia de Ezcaray como fin último
de sus investigaciones. Por eso aunque Arregui aporte doscientos
treinta y seis nombres no publicados por Merino éste confecciona,
veinte años después, sus listas definitivas con la
sola toponimia recogida directamente por él. Como consecuencia
de esto el autor del Diccionario de toponimia actual de La Rioja,
seguramente pensando que Merino había incorporado a su obraa
el total de las publicaciones existentes, deja de publicar doscientos
treinta y seis nombres de Ezcaray que además hubiera encontrado,
de habérselo propuesto, con relativa facilidad, en la biblioteca
del Instituto de Estudios Riojanos.
Esto no ha de restar un ápice del mérito que ha de
atribuirse a Don Juan Bautista Merino Urrutia cuyos trabajos sobre
Ezcaray y otros municipios de La Rioja van a ser muy dificiles de
igualar. Reciba pues desde aquí mi más sincero homenaje
y únase a él Don Santiago Arregui Belar, yo no estaría
seguramente aquí sin el ejemplo de ambos.
Gracias a ellos sabemos que gran parte (yo me atrevería a
afirmar que la mayor parte, pero hay que darle tiempo al tiempo)
de la toponimia de Ezcaray es de formación vasca. Considero,
sin embargo, que aún quedan multitud de nombres esperando
ser recogidos, véanse sino los ochenta y seis nuevos topónimos,
de un total de ochocientos veintiocho recogidos oralmente por mí
(más de un 10% del total de los conocidos hasta el momento).
O los diecinueve recogidos por Antonino González Blanco en
la letra -A- de su Diccionario, de los que once hubieran sido seguramente
incorporados por Merino al corpus de los recogidos por él,
aunque uno al menos Arrosartia pueda ser variante de Arrasartía
ya publicado por Merino, habrá que verlo en su momento.
En fin, si la recopilación de topónimos de origen
romance en la zona de Ezcaray está prácticamente sin
empezar la de la toponimia de formación vasca no parece haber
concluido todavía.
arriba
TOPONIMOS QUE FIGURAN EN EL DICCIONARIO
DE TOPONIMIA ACTUAL DE LA RIOJA Y NO EN MIS FICHAS (LETRA -A-).
- ABRENIOCHA
- ACADEMIA GENERAL MILITAR, PLAZA DE LA - EZCARAY
- ALDEA, LA - CILBARRENA
- ALDEA MEDIA - CILBARRENA
- ALDEA SAN JUAN - CILBARRENA
- ALORIA, RIBERA DE RIO -
- ALTEÑA, PICO - AZARRULLA
- ALTRUPIA
- ALZUFRA - ZALDIERNA
- ALMENARES, TERRERA
- ANDALUCES, GALERA LOS - AZARRULLA
- ANITARRENA
- ANTICAPRADO
- ARRASO
- ARBOLEDA, LA
- ARROMANTE, FUENTE DE - ALTUZARRA
- ARROSANTIA (ARRASANTIA M.U.) - SAN ANTON
- ARRUBIA
- AVELLANAR, EL
- NOMBRES NO PUBLICADOS EMPLEADOS EN LA CONFECCION DEL GRAFICO
- ACABIESO, EL - ALTUZARRA
- ALAGUILLO, COLLADO - POSADAS
- ALTUBARRIA - URDANTA
- ANTECUYA - ALTUZARRA
- ARANJUELO
- ARANZAYA - ALTUZARRA
- ARREA, PEÑA - AYABARRENA
- ARRIZADA, LA - TURZA
- ASTRIZO, MONTECITO EL - TURZA
- BANACIA
- BERROLAGÜENA - POSADAS
- BICHICUENA, MAJADA - POSADAS
- BRÍMPICHA, LA - ALTUZARRA
- CAIZA, MAJADA - POSADAS
- CILBÁRRENA - POSADAS
- CLÁBURA - POSADAS
- CHERCOLAGUILA - ALTUZARRA
- CHOCORREGO - POSADAS
- DORUBIA, MAJADA - POSADAS
- ESCORRACIA, MAJADA - POSADAS
- ESPARCIA - POSADAS
- ESPELLATENA - POSADAS
- ESQUÉCILA, SOLANA - TURZA
- EZPURA - POSADAS
- FRANCHA, PRAOS DE LA - TURZA
- GARANZADIA - ALTUZARRA
- GUINDELEZPURA - ALTUZARRA
- GUIRERON, EL - POSADAS
- GUSTIBUENA, MAJADA - POSADAS
- ICOQUIA - AYABARRENA
- JUANPERILLO - TURZA
- JUANPEREZ - ALTUZARRA
- JUANBARBICIA - TURZA
- LACHOLRRA, FUENTE - TURZA
- LAGUEZPURA - POSADAS
- LALMAGRE - POSADAS
- LAMBERZA - CILBARRENA, URDANTA
- LANCECOLLA - POSADAS
- LANDARRUTE - ALTUZARRA
- LARCACEL, HUERTA - TURZA
- LARREN - TURZA
- LARREÑAL - TURZA
- LÁUCILLA - POSADAS
- LAZARCIA - ALTUZARRA
- LAZURIA, LA - TURZA
- LUEÑAN, SANTA MARIA DE - ALDEA
- MANTENTURRIA - POSADAS
- MANTURRA - CILBARRENA, URDANTA
- MARINOQUINA - ALTUZARRA
- MAZACRIBILA - TURZA
- MÉRRUCIA - POSADAS
- MICAZABALA - BONICAPARRA
- MILÍNCHITA - TURZA
- MINGAÑA, CERRO - TURZA
- MIZANAZAS - TURZA
- MIZICABALA - TURZA
- MORIANA - ALTUZARRA
- MOSQUIJO - TURZA
- MOSTAJO, MAJADA - POSADAS
- ONTURUMBIA - POSADAS
- PRÉMUCHA, PASADA - TURZA
- PODOLTURRA - POSADAS
- PÉRRIGA - ALTUZARRA
- PARCECOLATO - ALTUZARRA
- QUILON, FUENTE - TURZA
- RAFIA, MONTE - TURZA
- RÁNCHITA - TURZA
- REA, LA PEÑA -POSADAS
- ROIZA, PEÑA - TURZA
- ROTECOLATO - ALTUZARRA
- SALESPURA - ALTUZARRA
- SITORTIA, SOLANA - POSADAS
- SOGRAMICIA - AYABARRENA
- SORIABARCENA - ALTUZARRA
- TORRUBIA - TURZA
- TORROZURIA - TURZA
- USARAMBIA -
- VIGARNA - TURZA
- VILORIENTAS, LAS - POSADAS
- VITORTIA, MAJADA - POSADAS
- ZAGATRIA, LA - ALTUZARRA
- ZALAGUA, LA - ALTUZARRA
- ZALAUNA, PICO - CILBARRENA, URDANTA
- ZARRACUYA, MAJADA - POSADAS
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