En la Historia, como en la Prehistoria, la
Rioja ha sido siempre teatro de choques de razas. No es extraño
que resulte también punto de interferencia de culturas.
En efecto, se observa que no sólo el tipo étnico
de sus habitantes es múltiple, sino que aun su etnografía
y su folklore y su misma lengua revisten carácteres de
variedad y multiplicidad mucho mayor que en las zonas circundantes.
Cada raza que ha pasado por el país, y ha posado en él,
ha dejado, además de su huella étnica, su huella
cultural propia. Huella, que, es obvio, hay que buscar en el ambiente
cultural del país mediante una investigación más
que horizontal, vertical, de perforación de estratos culturales.
Y es que muchas de aquellas huellas son ya como restos fósiles
soterrados bajo capas superpuestas, resultantes de las diversas
culturas que en él se han sucedido.
Tal es el caso que vamos a presentar en este artículo a
la consideración y examen de nuestros lectores.
Prescindiendo de la Prehistoria y la Protohistoria
(con sus invasiones de celtas e iberos) en la Rioja en tiempos
históricos ha chocado desde luego la cultura romano-visigótica,
parapetada en las montañas del Norte, con su cultura
musulmuna, invasora de la Península por el Sur; como
anteriormente había chocado la cultura y la raza indígenas,
con la raza y cultura latino-romana invasora de la Península,
centrándose, sin duda, lo más duro de la resistencia
y del choque, igualmente, en esta nuestra zona, amparada en
la región montañosa del Norte peninsular. Al pie
de las grandes sierras se libraron siempre las grandes luchas.
TOPONIMIA RIOJANA
UN PRÉSTAMO DEL
ÁRABE A LA TOPONIMIA DE LA RIOJA Y OTRAS
Berceo, nº 27, 1953, pags 335-341
En anterior artículo sobre el mismo
tema de la Toponimia de la Rioja, tratamos nosotros de dar a
conocer su préstamo de la lengua vasca a dicha Toponimia.
Mejor dicho, préstamo del Latín a través
del vasco: el nombre de la Cruz, Corocia, Crocia, Grocio.
Hoy vamos a tratar de un préstamo de la lengua árabe.
No son muchos los préstamos árabes en la Toponimia
Riojana. No faltan algunos, ciertamente. Alcanadre, Alfaro,
Azofra, Almudébar, Almunia... son nombres de transparente
naturaleza mora en nuestra tierra. Pero, al parecer, no son
ellos muchos. Las rebuscas de nombres de origen vasco por Juan
Bta. Merino Urrutia en tierras riojanas (1), han dado
hasta hoy un resultado bastante más abundante que la
de nombres de tipo árabe rebuscados por otros investigadores.
Hoy vamos a registrar un préstamo árabe que, por
su notable extensión en esta Región, reviste una
importancia excepcional. Nos referimos al substractun radical
nahar-"rio", de origen semítico que,
en diversas formas,-todas ellas perfectamente lógicas-
se halla en la formación de varios topónimos de
la región circundante de la Rioja.
Veámoslo:
Radical Nahar en la Toponimia Riojana
y Burgalesa
Desde luego en forma muy pura y coincidente
con el nahar originario, lo hallamos en el nombre arcáico
de la Población alto-río-jana de Casa la Reina.
Esta Población del Río Oja aparece en los documentos
de la Edad Media, ostentando el nombre de Naharruri,
voz hibrida, compuesta del semítico nahar, más
el vasco uri, en significación completa de "población
de nahar o río" (2).
Una elocuente réplica de este nombre riojano la hallamos
en tierras burgalesas-antaño vascas-a pocos kilómetros
de la Capital Castellana, en Ibeas de Juarres, en dos términos,
llamado el una Nafarruri, y el otro Nafarra
sencillamente (3) en relación, sin duda, con el Reino
de Navarra, como luego veremos.
La radical Nahar en el nombre de Navarra
Este doble nombre burgalés Nafarruri,
Nafar reviste ya una forma nueva, una forma variante, con f
en lugar de la originaria gutural aspirada h Nafar; variante,
por cierto, que arroja mucha luz para nuevas posturas en relación
con la extensión del nombre. Y es que, a la vista de
estas dos réplicas y equivalencias, no cabe duda de que
el propio nombre del antiguo Reino de Navarra, debe su origen
al mismo nahar.
En efecto, el nombre vasco de Navarra-su primitivo nombre, como
quien dice-, es Nafarroa (4), así como el correspondiente
adjetivo "navarro" es nafarra... Una típica
conversión de la originaria h en f, no de otro modo que
la f de ferrum, ficus, fagus, v.gr.: se convierten
en hierro, higo, haya. Y en esta misma serie cabe poner-aunque
también él por referencia al Reino de Navarra
más que directamente a nahar-el nombre alavés
al N. de Vitoria Nafarrate ("Puerto de Navarra").
Nombre que, a su vez, nos lleva como de la mano al riojano Navarrete,
nombre que apunta una nueva evolución, de la f en v (de
Nafarrete en Navarrete) y
que a nuestro modo de ver, más bien que un diminutivo
en ete de Navarra, debe considerarse como Navarrete
("puerto de Navarra").
Como se ve, pues, la h de nahar, conforme a esto, evoluciona
en f, nafar y la f, a su vez, en v, navar,
sonidos todos ellos aspirados y, por lo mismo, similares entre
sí. A la cual triple evolución que decimos hay
que añadir aun otra más, y es la f en p, cosa
que ocurre corrientemente en boca de los vascos actuales de
Vizcaya y Guipúzcoa, quienes más bien que Nafar,
dicen Napar, de igual manera que de los términos
latinos ficus=higo, fagus=haya, y ferratum=herrada, dicen piku,
pagu y pagarra...
El cambio o evolución de f en v, encuentra asimismo un
elocuente eco en la fonética vasca de baba por faba="haba",
y en la alternancia dialectal vasca del referido pagu, que tambien
se dice bagu, vid, Bagozu, Bagüés.
Esta doble evolución de la h (Nahar)
en v (Navar) quedó perfectamente estereotipada
en un interesante tríptico de apellidos riojanos que,
en el correr de los tiempos se formó, y sin duda los
tres apellidos de que consta, son variantes de uno solo. El
triptico lo forman los tres apellidos de Navarro, Najarro
y Naharro.
Como se ve, en el tríptico tiene cabida también
una nueva variante en j (Najarro), que a cualquiera podría
inducirle a pensar en un nombre más, y también
él muy riojano, en cuya formación cabría
en hipótesis suponer que ha intervenido la radical nahar
que decimos. Es el nombre de Nájera.
No será también Nájera una variante más
de Najarra, de Naharra, Nafarra, Navarra?
Nos explicaremos.
Etimología de NAJERA
Este nombre de la famosa Ciudad riojana,
DE TOPONIMIA RIOJANA
TOPONIMOS, REFLEJO DE INSTITUCIONES SOCIALES
MEDRANO
Berceo, nº 27, 1953, pags 467-471
En anteriores artículos dijimos que
la toponimia "habla". Hoy vamos a oir a la toponimia
riojana hablarnos en la última de sus lenguas: el romance
de Castilla, el romance de Berceo, el castellano del siglo XIII.
Antes le oímos hablar en lengua vascona y árabe
y nos habló de ocupación mora y de reconquistas.
Hoy nos va a hablar de una antigua institución social:
de Sociología. Le vamos a ver reflejar en sus nombres
una institución familiar de la Edad Media, un modo de
constitución de un patrimonio, patrimonio de tipo materno.
Hay en la Rioja Alta, no lejos de Navarrete,
al pie de Moncalvillo, un pueblo que recibe el nombre de Medrano.
Tal va a ser fundamentalmente el tema de nuestra disertación.
Medrano, además de una villa riojana, es un
apellido muy extendido en esta región y no poco en Navarra,
donde adquiere categoría de apellido ilustre y de ilustre
prosapia. Hasta de emparentados con la familia real navarra,
si hemos de creer a los heraldistas y reyes de armas.
El origen de la familia Medrano se pierde en la noche
de la leyenda.
Una leyenda de frontera de moros
Erase una vez un moro de la morería.
Valiente caballero él. Enjaezaba cierto día un
brioso caballo para una razzía por tierras de cristianos,
cuando ve que vuela hacia él una ave misteriosa que lleva
en su pico una tira de pergamino escrito. La tira de pergamino
decía: AVE, MARÍA, CRATIA PLENA.
Recibióla el moro como ave de buen agüero, y se
dispuso a seguirla. Y, siguiéndola, llegó a tierra
de cristianos, donde se cristianó y se puso a servir
al rey del país. El país era Navara. Y el Rey
le honró mucho y le dió tierras donde afincar.
Pero el moro converso no hizo fortuna en tierra extraña.
Y sus paisanos, enterados de su deserción, preguntaban
a los cristianos: -¿Medra? Y los cristianos respondían:
-No. Y así, de aquella pregunta ¿Medra? y respuesta,
No, se formó el apellido Medrano del caballero moro...
El caballero moro, que huyó de la morería para
hacerse cristiano en Navarra, donde luego adquirió gran
renombre, y sus descendientes llegaron a casar con infantas
de la Real Casa.
Hasta aquí la leyenda.
Crítica
Destaquemos en el relato su última parte:
la explicación del significado del nombre: -¿Medra?
-No.
gorantz-arriba