CHEMA ARANAZ CORDÓN

 

 

 


Sobre un libro no subvencionado. Diario de Noticias, 9-02-2001.

EL martes pasado Diario de Navarra se hacía eco de la presentación del libro "El euskera en la Ribera de Navarra", del periodista corellano Jabier Sainz Pezonaga, y en su introducción se hacía mención a la subvención recibida por parte del Gobierno de Navarra. Este dato es inexacto, aunque debo aclarar que en ningún caso es achacable a la periodista, que realizó su trabajo con toda corrección, basándose, con toda probabilidad, en el texto impreso en todos los ejemplares editados que hace referencia a la citada ayuda.
Por la premura de fechas, el libro tuvo que imprimirse antes de conocer la contestación oficial, aunque nos parecía lógico que ésta fuese afirmativa dadas las características del libro y las bases de participación. Por último, y contrariamente a lo supuesto, el Gobierno de Navarra no ha considerado oportuno darle ninguna ayuda en esta convocatoria. No es mi intención con esta carta entrar en valoración alguna de este hecho, sino rectificar a los lectores la exactitud y circunstancias de lo ocurrido.

Txema Aranaz Cordón, editor


Desmesura... en ojo ajeno. Diario de Noticias. Cartas al Director. 3-05-2006

EL día 9 leía, perplejo, en la mesa de un bar, un artículo del periódico titulado Desmesura , referido al espectáculo informativo dedicado al polaco.
Por lo visto, en este periódico, han olvidado la parábola de la paja en ojo ajeno y la viga en el propio, porque si ha habido en Navarra un diario volcado obscenamente en ser más papista que el de Cordovilla, éste ha sido DIARIO DE NOTICIAS. Durante días y días, suplemento tras suplemento, el lema que encabeza el periódico ha sido otro: "El periódico de todos los... beatos".
Tras los seriales dedicados a las Javieradas (otro invento del nacional-catolicismo), de todas las procesiones posibles e imposibles y del púlpito instalado en el periódico para que el tal Sebastián disfrute gratuitamente de la audiencia que libremente decide no ir a escucharle a sus iglesias, este espectáculo exhibicionista ha sido más que una declaración de intenciones. Como decía Ollarra en el diario auténtico -eufórico de que vuelvan sus buenos tiempos-, esto ha sido un "triunfo de la Iglesia", y que los triunfos continuarán, como con el... Cid. Más claro, agua.
Uno creía que el carácter progresista del que habla el periódico era otra cosa, como librarnos definitivamente del cautiverio y el soborno de la Iglesia franquista, siendo, además, consecuentes con lo que la Santa Constitución obliga sobre el carácter aconfesional del Estado. Un concepto que el Diccionario de la Real Academia explica sencillamente a quien no lo sabe, y que también puede encontrarse en cualquier manual de sentido común y buenos modales. Pero, por lo que se ve, alguien ha decidido que la Audiencia bien vale una misa. Muy bien, están en su derecho, pero también lo tenemos los demás para desearles que San Pedro se la bendiga.

Txema Aranaz Cordón


LOS FUSILADOS LLAMAN A LA PUERTA DEL PARLAMENTO DE NAVARRA.
Por Txema Aranaz Cordón. Nieto de asesinado y desaparecido en 1936.
Diario de Noticias, 19-02-2003


EL día 11 de febrero, nuestra Asociación de Familiares de Asesinados fue recibida en la Comisión de Convivencia del Parlamento, donde fuimos acogidos con amabilidad y aprecio por todos los grupos; todos, salvo el que pueden imaginar, incapacitado por sus convicciones para condenar el levantamiento militar del 36 y los crímenes llevados a cabo contra nuestros familiares.
De esta comparecencia se han publicado algunas crónicas que no reflejan los acuerdos que elaboramos con este motivo, e incluso los desvirtúan. Conocido, además, el borrador de cuatro puntos que la citada Comisión va a debatir para presentar a la Junta de Portavoces; hemos podido confirmar que, tanto nuestro manifiesto como los criterios de Justicia que le dan forma, han sido eliminados. Dado que nuestra propuesta -y no otra- también la hemos presentado en todos los ayuntamientos de Navarra, y la estamos dando a conocer a todas las personas que deseen apoyarlo, creo necesario algunas puntualizaciones. Aunque las hago a título personal, espero que respeten la opinión y los deseos manifestados claramente por nuestra asociación, AFAN 1936.

1. En primer lugar, decir que la actividad y las decisiones de nuestra asociación no tienen ninguna relación con las actividades y los objetivos de partido alguno.

2. Como familiares y víctimas más cercanas de los asesinados, es a nosotros a quien nos corresponde decidir el contenido de nuestras iniciativas y propuestas para ser escuchadas y atendidas por el Parlamento; no a la inversa.

3. Las iniciativas o acuerdos que lleven a cabo los partidos contrarias a lo expresado por nuestra asociación en el documento que hemos presentado, pertenecen a su exclusiva responsabilidad. Nuestra petición de Justicia es tan evidente que no necesita de ninguna operación de cintura o ingeniería política para ser apoyada.

4. No hemos participado, ni lo haremos, en ningún acuerdo que con la pretensión de sumar apoyos supongan la censura o el maquillaje de nuestras legítimas y mínimas reclamaciones de Justicia.

5. Si el Parlamento decide llevar adelante un acuerdo que no respete el texto presentado por nuestra asociación, será de exclusiva responsabilidad suya y no contará con nuestro apoyo. Si desgraciadamente se diera el caso, así lo haremos saber a nuestros conciudadanos.

6. Entre las informaciones facilitadas, se reproduce un texto con el título Exclusión expresa de la venganza que, junto con otros, formaba parte del presentado en el Parlamento por Batzarre cuando nuestra Asociación no existía, y que el borrador de la Comisión ha recogido "prácticamente sin cambios sustanciales".
Pues bien, queremos suponer la buena fe de los implicados, pero tenemos que decir que ese texto no es el que nuestra asociación aprobó por unanimidad para ser presentado en el Parlamento. Es más, cuando se nos presentó como "un simple borrador inicial", fue rechazado, y de forma expresa las consideraciones referidas a la venganza. Y así lo decidimos por respeto a nuestros familiares asesinados y por respeto a nosotros mismos; porque nadie tiene derecho a colocarnos en la balanza de los sospechosos y someternos a un cacheo, exigiéndonos una declaración previa de buenas intenciones para que, una vez desinfectados, estar en disposición de ser atendidos por las gentes de Orden. Esas instituciones que todavía no ha tenido el decoro de pedir un simple perdón, cuando muchos de nuestros familiares asesinados siguen en cunetas y fosas franquistas. Instituciones que debieron ser las primeras en dar ejemplo hace ya muchos años y que, sin embargo, no pueden pasar por el detector de la vergüenza, porque sus alforjas siguen cargadas de monumentos y símbolos franquistas, a los que siguen sacando brillo.
SI ésta es una sociedad democrática, no sometida al miedo o al chantaje de quienes en Navarra impusieron el terror y la larga sombra de su victoria, ¿cuál es, entonces, la razón por la que debemos excusarnos previamente de nuestras intenciones para reclamar la Justicia que se nos debe? Nuestra asociación no tiene nada de lo que avergonzarse porque lo que pedimos no es ni caridad ni comprensión paternalista.

7. Nuestras reclamaciones se apoyan en un elemental sentido de la Justicia, y son tan básicas que ni siquiera hacen uso de lo que nos da derecho la resolución de la ONU de 1992 sobre personas desaparecidas. Esta declaración afirma en sus consideraciones generales sobre estos hechos que "su práctica sistemática representa un crimen de lesa humanidad", y pide que se "establezcan normas destinadas a castigar y prevenirlos». Y sigue: Artículo 7: "Ninguna circunstancia, cualquiera que sea, (...) puede ser invocada para justificar las desapariciones forzadas".
Artículo 17: "Todo acto de desaparición forzosa será considerado delito permanente mientras sus autores continúen ocultando la muerte y el paradero de la persona desaparecida y mientras no se hayan esclarecido los hechos".
Artículo 18: "Los autores o presuntos autores (...) no se beneficiarán de ninguna ley de amnistía especial u otras medidas análogas que tengan por efecto exonerar de cualquier procedimiento o sanción penal".
Los políticos parecen desconocer que estos delitos no prescriben, que el Estado español está obligado a cumplir la resolución y que, de no ser así, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas tiene competencias para intervenir, como así lo están haciendo en otros lugares. Resulta humillante tener que recordar que nosotros no somos los delincuentes, sino los sujetos de esos derechos que piden Justicia.

8. La Comisión de Convivencia ha preparado un borrador de propuesta a la Junta de Portavoces de cuatro puntos, que pasarían a ser votados en el pleno extraordinario del Parlamento. Su lectura nos ha producido sorpresa y una enorme decepción, pues no solamente excluyen el texto propuesto por nuestra asociación, sino que eliminan cualquier atisbo de la autocrítica que debería adoptar y reconocer el Parlamento de forma ineludible. Un texto que omite cuidadosamente cualquier referencia directa al franquismo y a los responsables de aquellos crímenes. Asesinos que ni siquiera son un negro recuerdo; simplemente no existen. Omisión, también, de las responsabilidades de otras instituciones, como la Iglesia Católica o cierta prensa, hoy premiada, que jugaron un papel determinante en la preparación y el devenir de los acontecimientos más inhumanos. Ninguna referencia, tampoco, a la activa pervivencia de monumentos y símbolos franquistas.
QUÉ extraña y pervertida democracia la que convierte al verdugo en juez paternalista, que a cambio de unas unas dádivas pretende que sus víctimas le dejen dormir la siesta en paz. Son ya demasiados años de franquismo y de espera para que aceptemos una humillación como ésta.

9. Por intereses partidistas, por ignorancia, por miedo o por tener algo que ocultar, algunos nos dicen que "no es bueno abrir viejas heridas". Pero saben que no es posible reabrir lo que nunca se ha cerrado, y que carecen de justificación para pedirnos que abandonemos a nuestros muertos en las cunetas para que culpables y cómplices no sean importunados. José Antonio Lorente, investigador becado por la OTAN y reconocido experto en identificación genética, declaraba recientemente sobre estos hechos que el proceso democrático "se cerró en falso", y que no se puede hablar de que estemos removiendo viejos fantasmas "por el derecho que tiene toda persona a recibir una sepultura digna, y por el derecho de las familias a dar sepultura a los suyos donde ellos decidan".
Las heridas pueden cicatrizar y permitir una convivencia más justa, y ojalá sea así; pero, para que esto sea posible, es necesario que los causantes de estos hechos y las instituciones que los sostuvieron, lo reconozcan y pidan perdón a sus víctimas y a toda la sociedad. Algo tan elemental que, incluso, la religión que defendían los golpistas, lo tiene como base y requisito indispensable de su funcionamiento.
La sombra del dictador ha terminado por manchar el nuevo siglo, no sólo de chapapote. Ahora, el Parlamento de Navarra tiene la ocasión de comenzar a limpiarlo. Eso es lo que le pedimos.